Terminada la guerra eludió la cárcel por minoría de edad y se entregó a la lucha clandestina contra la Dictadura. En 1947 es nombrado Secretario General de la Juventudes Libertarias, y un año después, a su regreso de un congreso en Toulouse es detenido en Madrid y condenado a 30 años de cárcel. En su domicilio se encontró una imprenta con la que se editaban las revistas "Tierra y Libertad" y "Juventud Libre". Cumplió más de la mitad de la condena, tras fracasar en un intento de fuga en 1956. Aprovechó los años de cárcel para su autoformación y así una vez excarcelado, pudo escribir numerosas obras sobre la Historia Española del Siglo XX, alguna de las cuales como la "Historia de la FAI" y la "Historia del Anarcosindicalismo Español" son hoy consideradas por casi todas las cátedras de Historia, manuales clásicos indispensables para el estudio de la Historia Española reciente. Asimismo era considerado como excelente traductor, siendo su traducción de Moby Dick una de las más recordadas. Innumerables mítines por el Estado español y paises vecinos jalonan su trayectoria cenetista desde la excarcelación.
Tras la muerte de Franco es nombrado primer Secretario Genrela de la CNT, organización de la que presenta los estatutos de legalización de la CNT en 1977.